Motivación y disciplina en el fitness

La motivación es el impulso para lograr la meta, pero con los días se va y la disciplina al asumir el compromiso es lo único que te mantiene, lo que te dará resultados muy productivos. De esta manera vas a poder mantenerte en el tiempo con tus metas, es el motor que se activa verdaderamente cuando buscas lo que quieres, lo que eso significa para ti.

Mantener la disciplina es ir al gimnasio a la misma hora todos los días aun sin motivación. Al hacer esto, el cuerpo empieza a reaccionar y alistarse cuando sabe que está llegando la hora. Levantarse todos los días a la misma hora y cuando suena disponerse para hacer esa actividad física que has seleccionado. Existen estudios que reflejan que las personas con autocontrol que siguen su planificación con rigor, son más felices, ya que toman decisiones equilibradas y, por ende, se sienten más satisfechos con sus vidas.

disciplina

Trabaja a diario la disciplina y trata de inculcar el hábito del ejercicio a tus hijos, bien sean infantes o adolescentes. Hay etapas en las que estás más motivado que otras, con mayor o menor energía y muchas veces lo harás mejor que otras. Lo importante es que te pases el switcher y que, ocurra lo que ocurra, continúes trabajando en el camino hacia este estilo de vida saludable, fitness, logrando la armonía. El punto no es cambiar, sino mejorar y evolucionar.

Enfócate en cómo te vas sintiendo, cómo vas viendo tu cuerpo, cómo están tus emociones, tu seguridad, cómo son tus pensamientos. Concientiza el presente, el ahora. Inspírate, ve a tu interior, a tu yo desde el corazón. Cada cuerpo es distinto y funciona diferente, por eso debes conocerlo y aprender lo que te funciona y es mejor para ti. Come y entrena de forma inteligente y date un tiempo eso forja la disciplina.

Como lograr una buena disciplina

  1. Encuentra una actividad que disfrutes: Si no disfrutas la actividad física que estás realizando, es más probable que te rindas. Encuentra una actividad que te guste y te divierta, y haz de ella una rutina.
  2. Busca un compañero de entrenamiento: Tener a alguien que te acompañe puede ser una gran motivación, también es una manera de mantenerse responsable y comprometida con tu rutina.
  3. Prémiate: Brindarte una recompensa al alcanzar un meta o hito, puede ser una forma de mantenerte motivado. Ya sea un día de descanso extra, un pequeño regalo, o ¡tu comida favorita!
  4. Visualiza los resultados: Imagina cómo te harán y cómo lucirás después de realizar una rutina de ejercicios de forma consistente. Mantén esa imagen presente en tu cabeza durante tu rutina para motivarte a seguir adelante.

Comienza poco a poco, establece metas realistas y enfócate en el progreso que vas logrando semana a semana. ¡Ánimo, tú puedes lograrlo!

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